Julio Iglesias vende sus propiedades en Punta Cana
La muerte de Óscar de la Renta y los impuestos motivaron la decisión
Pese a su inactividad profesional de los últimos años, el cantante Julio Iglesias sigue muy presente en la gestión de su fortuna, y ha optado por liquidar parte de su patrimonio y recuperar cash con el fin de invertirlo de otra manera.
Desde hace tiempo colgó el cartel de «se vende» en la impresionante parcela que posee en Indian Creek (Florida). «Se trata de tres hectáreas sobre el agua, un terreno de unas dimensiones que, te aseguro, nadie tiene en la mejor zona de Florida y por el que pide 120 millones de dólares (98 millones de euros). En Palm Beach no hay otra parecida», asegura un experto en inmuebles de Miami.
Tras muchos años allí, decidió derribar el complejo y comprar otra residencia cercana, no tan grande, donde actualmente vive su mujer Miranda Rijnsburger con los hijos fruto de este segundo matrimonio. Pero donde Julio pasa más tiempo es en su residencia de Punta Cana.
Precisamente República Dominicana es el país que Julio Iglesias eligió para sus inversiones más ambiciosas, siempre de la mano del diseñador Óscar de la Renta, a quien consideraba un hermano.
Junto con Frank Rainieri y Theodore W. Kheel montó el Grupo Punta Cana, que tiene, entre otras propiedades, el aeropuerto de la localidad, dos campos de golf, varias urbanizaciones y hoteles.
Julio y Óscar vivieron unos años dorados hasta la muerte del diseñador dominicano en 2014. Esa pérdida, además de las nuevas y más duras normas fiscales en la República Dominicana, motivó que meses atrás el cantante decidiera dar un vuelco y vender toda su participación -un 25 por ciento-, quedándose únicamente con un 5 por ciento del aeropuerto de Punta Cana.
«Desde que Óscar murió, Julio ya no se encontraba a gusto. Nunca se entendió del todo con Rainiero y eso, unido a los cambios fiscales, que ya no son tan atractivos en este país, hizo que liquidara su porcentaje. Además de esa pequeña parte del aeropuerto -que supone un gran negocio-, lo único que mantiene en este país caribeño es su casa de Punta Cana, donde pasa casi todo el tiempo. Por esta operación de venta se calcula que puede haberse embolsado cerca de 300 millones de dólares (245 millones de euros)», comenta un inversor de la zona.
Gente cercana al artista asegura que con esos beneficios ya habría adquirido una mansión en Panamá, hoy foco de atención de los inversores que buscan lugares con una fiscalidad atractiva. «Julio se está haciendo mayor y no sería extraño que quisiera poner su patrimonio lo más accesible posible, para organizar bien las cosas de cara al día de mañana», añade una persona de su entorno. [ABC]