El poder del español en los Estados Unidos
En los Estados Unidos viven cerca de60 millones de latinos: esta cifra incluye inmigrantes y descendientes de inmigrantes que han llegado desde América Latina.
Y del total de la población estadounidense, 41 millones habla español en sus hogares, de acuerdo a estimaciones de la Oficina del Censo de EE.UU.
Para 2060, se estima que EE.UU. será el segundo país hispanohablante del mundo después de México.
Pese a que el español es el segundo idioma más hablado en el país después del inglés, no siempre ha sido bienvenido ni considerado de igual importancia.
En el pasado existieron políticas institucionales para suprimirlo en las aulas y surgió un movimiento proinglés que aún vive y promueve que este sea el idioma oficial.
En los últimos años se han registrado también incidentes contra personas que hablan español en público y que han sido vinculados con el clima antiinmigracióna partir de la retórica y las políticas del presidente estadounidense, Donald Trump.
Creciente influencia
En menos de cuatro décadas, el número de personas que hablan español en casa en EE.UU. se ha cuadruplicado de 11,12 millones en 1980 a 41 millones en 2017, según datos del censo.
Hay que sumar además otros casi 15,8 millones con competencia limitada en el idioma, de acuerdo a un informe de 2019 del Instituto Cervantes en EE.UU.
Ya en 1980 el español era el segundo idioma más hablado en el país -le seguían el alemán y francés- y mucho tuvo que ver el boom de inmigrantes provenientes de Latinoamérica.
Estados Unidos pasó de tener una población de 9,1 millones de hispanos o latinos en 1970 a casi 60 millones en 2019, el 18% de la población total, de acuerdo a estimaciones del censo analizadas por el estadounidense Centro Pew de Investigaciones.
Según las proyecciones del censo, los latinos o hispanos serán 119 millones en 2060. Es decir, uno de cada tres residentes en EEUU será hispano o latino.
Pero esto no quiere decir que todos vayan a ser hispanohablantes. De hecho, el 28% de los latinos no hablaba español en el hogar en 2017.
Sin embargo, la mayoría de los latinos nacidos en EE.UU. dicen sentirse conectados con el idioma de sus padres y abuelos.
El 85% de los padres y madres latinas se comunican en español con sus hijos, de acuerdo a una encuesta nacional realizada a 1.500 latinos en 2015 por el Centro Pew.
El poder del español es cada vez más palpable también en la industria musical y en deportes multitudinarios como la pelota, donde los jugadores latinos o hispanos reemplazaron a los afroestadounidenses como el segundo grupo étnico/racial dominante en el deporte en 1993, después de los blancos.
Ese año el 20% de los jugadores de las Grandes Ligas del Béisbol (MLB, por sus siglas en inglés) eran de origen latino o hispano, de acuerdo a datos compilados por la Sociedad Estadounidense de Investigación sobre el Béisbol (SABR, por sus siglas en inglés).
En 2017, el porcentaje aumentó a casi 32%, de acuerdo con datos de la MLB.
Elecciones 2020
La elección presidencial de 2020 será la primera en la que los latinos conformarán la minoría más numerosa del electorado, con un 13% del total de potenciales votantes.
Esto se traduce en la cifra récord de 32 millones de hispanos habilitados para votar, lo que ha hecho que las campañas del Partido Demócrata y Republicano recurran al español para atraer el llamado “voto latino”.
Candidatos demócratas como Beto O’Rourke y Cory Booker lanzaron frases en un atropellado español en el primer debate presidencial el pasado junio y su contrincante Joe Biden anunció una campaña por Twitter llamada “Todos con Biden”.
Del lado republicano, el vicepresidente Mike Pence lanzó la coalición Latinos for Trump hace cuatro meses y en las comunicaciones del grupo se leen mensajes en espanglish como “Vamos to Victory”.
Se cree que el español es una forma directa de llegar a este electorado, decisivo en estados competidos por ambos partidos y con una población latina numerosa como Florida, Nevada y Texas.
Asimismo, después del inglés, el español es el idioma más estudiado en todos los niveles de enseñanza en Estados Unidos.
Un total de 7,4 millones de estudiantes de etapas primaria y secundaria recibieron clases de español durante el año escolar 2014-2015, en comparación con 1,3 millones que vieron francés y casi 331.000 que se matricularon en alemán.
Fuente BBC/La historia completa dando clic aquí